Foto: David Larrosa, 10 años

martes, 30 de agosto de 2011

ESTÁN AQUÍ...

    Una de las noticias más interesantes del telediario de hoy tiene que ver con la recomendación de la Royal Society de elaborar un plan mundial para la resistencia a un ataque alienígena. “Si se produce una invasión, será violenta”, lapidan.
    La señora María siempre tuvo la sospecha de que las novelas de ciencia ficción, y hasta los tebeos, dibujaban una fantasía disuasoria; la mejor operación de descrédito de todos los tiempos: asociar el peligro real a los medios más superficiales y fantasiosos para restar credibilidad al asunto. Una operación de desprestigio made in USA, claro, aunque algunas décadas antes que lo de Wikileaks. El carácter obsoleto del invento se manifiesta ahora con la grave revelación de la Royal Society. (O son unos bocazas, piensa.)
    La señora María sospecha que los alienígenas conviven con los terrícolas desde los años cincuenta, pero que no son depredadores ni violentos, como cree la Royal Society, sino seres superiores, capaces de comunicarse sin hablar y de percibirse en colectividad sin manifestarlo. Por eso, cuando viaja en metro, intenta adivinar quiénes entre sus compañeros de viaje son alienígenas disimulando su condición, y quiénes terrícolas ignorantes. Espiándolos con esmero, alguna vez ha logrado pillar algún cruce de miradas delator. También está convencida de que esos mismos seres superiores se amalgaman con las clases dirigentes y tratan de enmendar el monumental estropicio en que se está convirtiendo la Tierra, ni más ni menos que porque ellos mismos han decidido hace mucho que el planeta azul sea lugar de paso, evolución o maduración de los alienígenas más limitados (más tontos). Es decir, enviaron desecho y no controlan.
    Por todas estas convicciones, la señora María observa profundamente a la presentadora que retransmite la noticia y, de pronto, asiste a una revelación: sabe que ella es la única telespectadora que ha descubierto sus orígenes extraplanetarios. Admirándose de sí misma (siempre tuvo su pizca de vanidad), se pregunta por un segundo si no tendrá ADN compuesto, o algún tipo de percepción extrasensorial superior, puesto que está a medio camino de descubrirles.
    Sobrecogida, nota la insistencia con que la presentadora la mira. No es una mirada; es una aguja hipodérmica que atraviesa la pantalla y la clava en el sofá de su casa. En ese instante, conmovida hasta la médula, oye que le susurran: despierta.


15 comentarios:

  1. Me ha atravesado esa aguja hipodérmica...Auhhh!!!

    Muy buena forma de llevarnos hasta un sueño...O no era un sueño?...Jeje

    Besos desde el aire

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  2. Conozco muy bien las sensaciones que en este momento embargan a la señora María: ayer vino Hermes a despertarme. Desde ayer ahorro para llegar a Grecia.

    Siempre es un placer leerte, Susana.

    Un beso enorme.

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  3. Esta vez estuve atento al día martes para venir...
    Muy buen texto, me hace dudar cada vez más de un vecino que tengo. No sé, ahora me quedo preocupado.
    Ahora será cuestión de esperar hasta el próximo martes.
    Un beso enorme.
    HD

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  4. Hoy por partida doble, Susana, vengo de La nave y ahora me lanzas esta terrible duda, yo que soy forofa de la ciencia ficción, no estoy segura si ellos están aquí o me pasa lo que a la señora María. Sea lo que sea me lo he pasado estupendamente con este Están aquí...

    Besitos

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  5. Si te fijas bien, existe un ligero desajuste entre lo que piensan algunos de estos seres y su forma de expresarlo. El caso más evidente es el de la duquesa de Alba, pero hay otros, muchos otros, pero ¿cuántos?

    Ahora mismo lo que me inquieta es que la comentarista que me antecede exponga sin ningún rubor que viene de "la nave". Dios mío, están por todas partes :-)

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  6. Me encantó la narración. Tenés una forma muy exacta (no parca) de contar los hechos, eso me resulta atrapante...
    y me parecio maravillosa la imagen del final, "una aguja hipodérmica que atraviesa la pantalla y la clava en el sofá de su casa".

    Gracias por compartir, Abrazo.

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  7. Ya me le temo a las peluqueras y ahora a los noticieros!! Muy bueno Susana, saludos desde Buenos Aires, Rosana

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  8. Muerte roja

    Esto es una redacción ficticia pero hay tantos que piensan lo que escribes que te sorprenderías.

    Muy bueno, me encanta

    Mil besos :)

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  9. Vaya Rosa, no quería pincharte. Gracias por compartir el duermevela.

    Patricia, el gustazo es tenerte a ti de lectora. Un abrazo gigante.

    Bienvenido todos los martes que quieras, Humberto. El resto de días voy yo. Gracias.

    Elysa, conseguir que me digas eso (que te lo pasas bien leyendo algo mío) es la mayor de las satisfacciones, como seguramente te pasa también a ti como autora. Gracias y un abrazo.

    Querido Odys, yo diría que con la duquesa ya te has metido otras veces, pobrecilla. Marciana o no, ya me gustaría a mí llegar a su edad con su salero y poderio... Gracias por pasar, amigo.

    Muchísimas gracias, Juan. Creo que no compartimos dimensiones pero sí exigencias. Un abrazo grande.

    No te preocupes, Ro, que de momento ya se me han terminado los micros de alienígenas. Un besazo.

    Seguro que sí, Muerte Roja. Gracias por tu comentario y un abrazo grande.

    Susana

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  10. Aquí viene una buena carga de ciencia ficción en corto, je. Espero, por favor, por favor, seguir leyendo sobre los visitantes de otros mundos. Saludos. Está muy bueno, y lo mejor que fuera una señora, y no un joven freak, quien esté alucinada.

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  11. ¡jesús1 me ha recordado a mi madre. Ella decía que le pasaba lo mismo.


    Es un placer leerte.

    Enhorabuena por los dos micros de La Nave

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  12. Gracias Eskimal, en realidad este micro formaba parte de un experimento (varios cortos de la señora María) que no saqué adelante. Tus palabras me animan a replanteármelo. Besos.

    Muchas gracias por tus palabras aquí y en La nave, Elèna. El gusto es contar contigo. Un abrazo.

    Susana

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  13. Y yo que me lo creo. Algo raro, raro, pasa.

    Una abrazo.

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  14. La señora María sabe de lo que habla. Una de las formas de convencerte de que algo es irreal es hacerte pensar que lo has soñado. Yo confío en que la señora María, experta como es en estas lides, no caiga en la trampa.

    Por cierto me parece un personaje muy atractivo para filtrar la realidad. Yo retomaría el proyecto.

    Besos, Susana.

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  15. Ya no se sabe qué pensar, Isabel. Gracias por tu visita.

    Pues muchas gracias por tu observación, Jesus. Volveré a pensarlo porque no dudaba de ella sino del engranaje. Me vuelves a animar. Un abrazo grande.

    Susana

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