Foto: David Larrosa, 10 años

martes, 3 de abril de 2012

AGUA ENTRE LOS DEDOS





        Lo micro no tiene tanta importancia, dices bajando por un momento, infinitesimal, la vista. Un instante de preocupación recorre tu rostro.

Sin la millonésima de segundo que hace falta para verlo, nadie habría percibido ese instante. Tal vez no debería existir.

No, lo micro no tiene tanta importancia, digo mirando, a través de la ventana del bar, las acciones que se suceden en la calle. El tropiezo de un chico en patín, el camión que adelanta a una moto o el aleteo de la paloma asustada. Todos los días, todo el tiempo, en un tiempo eternamente micro, se pierde azarosamente la importancia.



22 comentarios:

  1. Es que la vida está hecha de milésimas de segundo, una pegada a la otra, incluso la propia. Pero nos perdemos la mayoría. Sólo recogemos, con alguno de nuestros sentidos, una milésima parte de esas milésimas encadenadas.
    Me gusta el encuadre, esa meláncolia que destila esa escena uno frente al otro, escapando con la vista por la ventana.
    Qué bien lo haces, puñetera.
    Un abrazo, Susana.

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  2. Susana, me gustó el tiempo como agua entre los dedos. Incluso lo más largo dura un instante. Y la importancia, infinitesimal, relativa, nula.

    Gracias por el relato. Besos

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  3. Me gusta esa estampa que dura un instante, todos los segundos cuentan, incluso las fracciones que tarda un camión en atropellar a un chico. Muy bueno, Susana, he visto la imagen retenida, la he visto, hasta con flash.

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  4. La importancia es relativa, como el tiempo, como las dimensiones con las que pretendemos medir las circunstancias que nos envuelven. ¿Qué es micro y qué macro? Para una hormiga, el mundo de los hombres es menos que micro, puesto que no existe. Para una hormiga no somos nada, aun teniéndonos enfrente.

    ¿Ha habido o no ha habido atropello? Tenemos indicios, pero el acto en sí sucede o no sucede tras un velo elíptico. Los actos aparentemente intrascendentes cobran su verdadera relevancia a posteriori. Hablar por teléfono mientras conduces, por ejemplo, o un estornudo violento y repentino al volante. Creo que me estoy liando, ¿no?

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  5. Quizás no exista el tiempo, y todo sea una fábula nuestra. Así, y sigo tu insinuación, no se podría escapar lo que no es ni existe. Aunque lo que permanezca sea sólo ese aliento poético, o el destello de un instante que no fue. Me encantó, Susana.

    Abrazos.

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  6. Si, Susana, abrir los sentidos para captar, esos grandes , pero diminutos momentos , que nos hacen volar..

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  7. Es que tan adictos que viajamos a los nombres no alcanzamos a ver que todas nuestras grandezas se componen de infinitos detalles; nadie se entera que cuando dos pares de pupilas se cruzan en el universo la muralla China se corre de su eje un cuarto de milímetro hacia el sur (esto está tuertamente comprobado).

    Me hiciste acordar a mi primera novela allá por los 17, donde un personaje le dice al otro algo así como que quizás la apertura del universo se encuentre en lo mínimo, quizás el estornudo de una mariposa sea un sonido esclarecedor, una luz que nos hacía falta (y no lo sabíamos).

    Como este inmenso detalle de dejar unas palabras en tu casa, y ver como se mecen por el Atlántico y llegan hasta Barcelona.

    Abrazos.

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  8. Tic, un micro-vida; tac, el siguiente. No todos los micros son buenos ni siempre podemos aprecias a los que lo son. Sin embargo, es cuanto tenemos.

    Comparto absolutamente la visión que me ha acercado tu texto.

    Un fuerte abrazo, Susana.

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  9. Si lo micro no tiene importancia no se podría cambiar nada, porque los pasos serían demasiado grandes, pero no, pasito a pasito sí podemos.
    Como el aleteo de una mariposa (o de una paloma) que pueden cambiarlo todo.
    Gran relato

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  10. Lo macro está lleno de micros. Y lo micro está lleno de macros. Me gusta el juego de espejos y la elipsis del texto, Susana. Todo es relativo, incluso las teorías de Einstein. Abrazos.

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  11. ¿Qué es más importante? ¿Ese inmenso cielo azul, o la pequeña gaviota que lo disfruta?
    Muy buen micro :)
    Un saludo, Susana.

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  12. En un segundo insignificante lo puedes perder todo o abrirse un maravilloso futuro prometedor...

    La vida es eso micro segundos camuflados en insignificantes cuando son los protagonistas de la vida en si.
    Hay que valorar cada uno de ellos porque... son únicos!!!

    Un fuerte abrazo :)

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  13. Muy buena reflexión... Y que mágico es sentir cada momento, todo lo que pasa a la vez.

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  14. Me encantó ese final que cierra y encierra un micro de gran sabiduría.

    Besos micros que hacen uno muy grande.

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  15. Me encanta Susana, lo veo más una reflexión y sin embargo tiene el poder de expandirse. Saber ver lo insignificante es una cualidad que tienes y nos transmites.

    Feliz semana y besos.

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  16. Muchísimas gracias, MIGUELÁNGEL, ARTE PUN, MANU, ODYS, AGUS, BOLI, JUAN, PATRICIA, ANITA, VÍCTOR, SERGIO, NIEVES, LUCAS, LOLA e ISABEL, un elenco de lujo hoy, por pasar por aquí y dejarme vuestros comentarios. Un abrazo muy fuerte a todos y cada uno y gracias por compartir la voluntad de atrapar lo ínfimo. Es decir, de microrrelatarlo.

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  17. Susana, este cuentillo sería el epígrafe para un "Manual de lo asombroso". Habrá que leerlo cuando alguien lo escriba, seguro, los grandes ojos, la respiración feliz por algo que es casi un milagro, aparecen con situaciones o momentos pequeños de la vida. De ahí nace lo fantástico, la literatura.

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  18. Hace tiempo oí que el número de estímulos -visuales, auditivos...- que una persona de hace dos siglos recibía en toda su vida era igual al número de estímulos que una persona recibe hoy en un solo día.
    Hay que sacar partido a esa sobredosis de información, y ver en cada cosa un micro, una vida, un mundo. Y hay que buscar la capacidad de almacenarlos y transformarlos.
    Abrazo
    Gab

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  19. Lo insólito de la existencia, lo micro tiene valor de universo y, sin embargo, la mayoría de las veces no nos damos cuenta.
    Coincido con propílogo, hay que almacenarlos y hacer de ellos algo hermoso.
    Un beso.
    HD

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  20. Gracias, ESKIMAL, PROPÍLOGO y HUMBERTO, por vuestra visita y vuestras palabras. Un gran abrazo.

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  21. Me gusta mucho el título, es perfecto, completa el texto y no lo destripa
    y es literalmente la sensación que deja la pieza, se escapa cuanto más queremos apresarlo...

    Abracico

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  22. Estoy de acuerdo con Rosana, ese título es perfecto. Me fascina ese segundo párrafo, no sé tiene tanto contenido, dice tanto, es "ver" al leerlo.
    No, lo micro no tiene tanta importancia, dice en ese párrafo final, tal vez... pero es nuestro y es importante.
    Sinceramente me quedo sin respiración al leerlo, Susana, tan pequeñito pero tan lleno de vida.
    Gracias.

    Besitos

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